mi primera vez
( Relatos Heterosexuales )


Gritar es lo que más me gusta y los penes en… es lo que me vuelve loca!!
Antes podría decirse que era una niña normal, que no estaba atada al sexo, nunca me había deleitado con sus placeres; sin embargo, continuamente me gozaba leyendo relatos como este, una y otra vez buscaba imágenes y palabras que provocaran esas sensaciones húmedas que me encantaba experimentar…
Esperaba estar a solas, para colocarme frente a la mesita de la computadora de tal forma que al estar viendo alguna curiosa película pudiera subir mis piernitas y deslizar una que otra vez mis dedos por la pequeña entrada del placer…
Nunca terminaba de curiosear en internet sin antes recostarme en la cama, tocando mis senos pequeños pero bien formados y metiendo mis dedos en mi va…
Como amaba esas tardes en mi casa, hasta aceptar que necesitaba algo más, necesitaba tener una ver… real en mi virgen ciño.
Nada mejor que un novio para satisfacer ese placer, después de 4 meses de una relación coqueta, en la cual más de un par de veses al besarlo me acercaba insinuante, o mordiendo sus labios e introduciendo mi lengua tal cual necesitaba que introdujera su ver.. en mi, de caricias fuertes e insinuantes, por fin me invito a su casa…
Cuando llegue, acepto que estaba muy nerviosa y tenía miedo de lo que pasaría, mismo miedo que me hizo mojarme al instante, imaginarme a mi practicando todas las posiciones ensayadas previamente en mi cama…
Mientras veíamos un película, empecé a besarlo y sin querer deslice mi mano sobre su polla, que asombro al ver su cara desconcertada, en ese momento supe que el cogerme no estaba dentro de sus planes, pero no me importo yo estaba decidida a dejar mi virginidad en su cama ese día…
Continúe besándolo olvidando el incidente, pero con más decisión, yo sabía que lo caballero se le olvidaría muy pronto, sé que me deseaba; quien no se tiraría a una colegiala de mediana estatura, con una pequeña cintura, caderas bien proporcionadas y un fabuloso trasero trigueño, incluso mis pequeños senos me daban una aire infantil que sabía, de buena fuente, que los enloquece, sabía que quería tener mis piernas largas abiertas de par en par para arremeter contra mi inocencia…
Y basto un par de minutos de imprimir toda mi cachonderia en unos besos para que de un arrebato me tumbara en su cama y abriera mis piernas, con la ropa aun puesta, restregó su enorme pene contra mi clítoris, fabuloso!!! Grite, y me hecho una mirada intrigada, pero pervertida, continuo con eses riquísimos arrimones, hasta levantar mi cadera de tal forma que si hubiera estado desnuda, hubiese quedado completamente expuesta…
Sentía como el calor de mis fluidos se dispersaba por mis piernas entre mis pantis negras de encaje, era mejor de lo que esperaba…
Con muchas fuerzas y como si fuera una lucha de dominio, conseguí montarme en él, para dar el siguiente paso y desabotonar mi blusa de seda y que sorpresa se llevo al ver como tan graciosamente deje caer mis pechos de mi sujetador color negro…
Se le llenaron los ojos de pasión e inmediatamente los tomo con sus manos, mientras yo me liberaba y cabalgaba imaginando la agradable brisa de una tarde en la playa…
Mi cadera parecía tener voluntad propia, se movía ferozmente, estaba tan excitada que el pantalón comenzaba a lastimarme, así que me levante y me despoje de el en un solo movimiento, había valido la pena tantas horas frente a la computadora…
Estas empapada de deseo mi amor, me dijo él, mientras colocaba su mano en mi parte baja, como quien explora algo totalmente nuevo…
Al mirar mi cara sulfurada, me dijo, pero me encanta saber que anhelas tanto mi verga…
Ahhh, grite al mismo momento que él se quitaba esos vaqueros que estorbaban un contacto más intimo. Y de nuevo arrimo su pene, pero esta vez sobre todo mi cuerpo y decía, siente, siente lo que has hecho, eres toda una maestra, mira como me la has puesto, dura y mojada, la quieres? La quieres? Verdad que la quieres!!!!
Pues deséala, porque no será tan fácil, aun no, esperare hasta que clames por ella, y continuo la tortura y me puso boca abajo, y sentía su polla por toda la espalda, resbaladiza y audaz cuanto la deseaba dentro de mí, sentía como mis piernas no respondían y comencé a sentir unos pequeños espamos y …
Me dijo, no aun no, si aun no tienes lo mejor, me quito la braga, estábamos completamente desnudos, me volteo, porque me dijo que quería ver la cara de perra que pondría, me abrío las piernas y entro completamente y sin dificultas, estaba tan excitada, que solo sentí un pequeño dolor al principio como antesala de lo que abría de venir, una y otra dentro y fuera de mi, grite asta hartarme de placer, ver el animal en el que mi caballero se convirtió me hacía sentir toda un puta de esas que siempre había querido ser, mordía mis seños, tomaba fuertemente mis manos…
Amos mas, mas!!! Parecía no saciarse y yo cual muñeca de trapo en todas las formas que mi mente recordó en ese momento, después se retire para tirar su leche en mi cara, asquerosamente exquisito, metió su dedo dentro de mi y paso lo impensables, mi venida le mojo la cara…
Que placer el de aquella primer tarde de incontables encuentros carnales…..




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Detalles



Nombre do Relato


Codigo do Relato
2106

Categoria
Heterosexuales

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