Mirada discreta
( Relatos Fantasias )


Hola a todos.

Como ya saben me gusta mi profesor aunque a veces me confunde y no puedo reaccionar ante él. A cada clase trato de vestirme súper bien, en las ultimas ocasiones llevó a la clase a uno de sus amigos y charlamos un rato después de ello me invitó a comer pero me negué. Me quedé en el salón a tocarme un poquito ya que durante la clase me senté de tal manera que una parte de mi ropa interior quedara a su vista, él aprovechaba para pararse a explicarle al grupo justo frente mio. Esa mirada "discreta" me excitaba en exceso, su mirada era como una enorme legua que me arrancaba la ropa interior y me recorría por toda mi escurrida vagina, escurrida por él, claro. <3
    Pues sí, ahí me quede a masturbarme un rato, usé un marcatextos y lo comencé a menear dentro de mí, lamia las puntas de mis dedos y los ponía en mi clitoris así hice buen rato hasta que mi ano me pidió placer y ensarté mi menique en él. tenia ya toda una fiesta hasta había olvidado que estaba en un salón y terminé en la silla. Comenzó mi siguiente clase con él, cada que podía pedirle ayuda lo hacia ir hasta mi lugar para poder acercarme lo más posible para percibir su aroma de hombre, me acercaba de tal manera que lo tocaba ligeramente con mis pechos y mis pezones se ponían duritos esperando por su lengua y sus húmedos labios.
Terminó el día y me fui a mi casa a usar mi dildo toda la noche hasta quedar agotada.
Al día siguiente me bañé y me puse el vestido mas ajustado que encontré. Era negro con puntitos blancos, largo a media pierna, con escote por enfrente y atrás. Pinté mis labios de un sutil rojo y me fui a su clase. Obviamente estaba cansadísima de tanto masturbarme me dormí a las cinco de la mañana pero aun así estaba temprano (8:00 a.m) en mi clase, limpia y sexy para él <3 Antes de entrar compré un café bien cargado y lo bebí todo. Estuve bien tres horas pero mi clase con él es de seis; todo iba muy bien, lo miraba con atención él me miraba y yo sonreía "amigablemente" hasta que él café hizo su efecto, comencé a sentirme muy alterada y ya no podía poner atención a mi chico sexy. Salí al baño me retoque el maquillaje, pronuncié más mi escote del tal manera que CASI se vieran mis pezones, ese día no usé sostén así que se veían perfectamente erectos; regresé. Afortunadamente estábamos por terminar la sesión. Cuando me preguntó:
-¿Te sientes bien?
-Sí, estoy bien. No hay problema
-Pues demos por terminada la sesión de hoy chavos, nos vemos el jueves.
Todos se fueron y yo levantaba mis cosas, sentí que me desmayaba y él se acercó.
-¿De verdad estas bien? estas algo pálida.
-Estoy un poco alterada bebí mucho café pero estoy bien.
Lo siguiente fue hablar de lo mucho que bebe café y lo pesado que es su trabajo, al final se acercó a mi y me dijo, tocando el escote de mi espalda resbalando su mano por mi hombro
-Has estado bajando de peso verdad?
-Claro que no
-Te noto más delgada Vane, debes de comer bien. (todo en tono muuuy amigable y tocándome recorriendo mi piel con sus manos grandes y calientes) Solo podía pensar en esas manos tocando mis muslos y subiendo despacio y sus labios recorriendo mi cuello. Me puso muy nerviosa y no supe que hacer exactamente, era excitación sexual, nervios y cafeína.
Mi mirada fue la de mujer lujuriosa y él se apartó, dijo que tenia que irse muy rápido pero por más que me despedía de él me seguía diciendo lo que haría, yo quería hacer dos cosas cogérmelo o irme a mi casa a meterme mi dildo pensando en él. Se despidió mil veces de mí de besito y cuando por fin se fue me clavo una mirada "discreta" pero muy directa, sentí como si estuviera guardando una imagen de mi para amarrarme los brazos a la espalada subirme el vestidito y descubrir mi culo a su merced. Su mirada se clavaba en mi par de senos blanditos y ansiosos por sus besos lúbricos, mis labios quieren gritarle que pare de hacerme daño con su gran falo mientras él me somete a nalgadas y violentas envestidas arañando mis muslos y mis nalgas. Deseo que me muerda los pechos y mis caderas y sentir mil veces su ardiente semen en mi cara y mi lengua. Que diga que soy su perra favorita y me obligue a lamerle toda su hombría, mi lengua y sus testículos jugando y escuchar y respirar agitado... Lo deseo con ansias. Espero la próxima clase no fallae


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Muy excitante sigue así con tus relatos
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Detalles



Nombre do Relato


Codigo do Relato
5059

Categoria
Fantasias

Fecha Envio


Votos
1